¿Qué pasaría si un día descubrieras que, en realidad, eres hijo de un dios griego que debe cumplir una misión secreta? Pues eso es lo que le sucede a Percy Jackson, que a partir de ese momento se dispone a vivir los acontecimientos más emocionantes de su vida. Expulsado de seis colegios, Percy padece dislexia y dificultades para concentrarse, o al menos ésa es la versión oficial. Objeto de burlas por inventarse historias fantásticas, ni siquiera él mismo acaba de créerselas hasta el día que los dioses del Olimpo le revelan la verdad: Percy es nada menos que un semidiós, es decir, el hijo de un dios y una mortal. Y como tal ha de descubrir quién ha robado el rayo de Zeus y así evitar que estalle una guerra entre los dioses. Para cumplir la misión contará con la ayuda de sus amigos Grover, un joven sátiro, y Annabeth, hija de Atenea.
Mi opinión:
Hace mucho tiempo que oigo hablar de este libro, pues parece que a casi todo el mundo le ha encantado. Y es por esto por lo que no me lo he leído hasta ahora.Tenía miedo de que me decepcionase ya que no estoy muy acostumbrada a personajes tan jóvenes y pensaba que me iban a parecer muy inmaduros. Pero finalmente adquirí el libro y ha superado con mucho mis expectativas.
Como ya he dicho, me esperaba personajes inmaduros e infantiles pero no es lo que he encontrado. Percy, el protagonista, tiene 12 años, pero a mí me ha parecido muy maduro para su edad. Es un niño que no ha tenido una vida fácil, ya que solían burlarse de él cuando era pequeño y tiene un padrastro que se porta muy mal con él. Además, es un imán para los problemas y no puede evitar que lo expulsen una y otra vez de sus colegios. Otros personajes que me gustaría destacar son Annabeth y Grover, los compañeros de aventuras de Percy. Annabeth es, al igual que Percy, hija de un dios y un mortal, y aunque tiene mucho carácter me ha caído muy bien. Y Grover es un sátiro, que, aunque es un poco torpe, servirá de gran ayuda a sus amigos
Es verdad que ha habido algunas peleas propias de su edad entre Annabeth y Percy, pero es no ha hecho que me hayan parecido inmaduros; solo que les haya cogido más cariño. Además ha habido momentos muy divertidos.
-No voy a decirle hola a un caniche rosa -dije-. Olvidadlo. -Percy -intervino Annabeth-. Yo le he dicho hola al caniche. Tú le dices hola al caniche. El caniche gruñó. Le dije hola al caniche. |
Me ha encantado como el autor consigue entrelazar el mundo actual con la mitología griega. Ha conseguido hacer que todo encaje perfectamente, como si fuese real aunque nosotros no podamos verlo. Y aunque no sepamos nada de mitología, todo en el libro está perfectamente explicado, sin que se haga difícil de entender o resulte pesado.
Otro aspecto destacable del libro es que rebosa acción. Los personajes se meten en líos continuamente: en cuanto resuelven un problema, se encuentran con otro. El ritmo de la lectura es muy bueno, precisamente por eso. Quizás lo más lento de todo sea el principio, pero hay que tener en cuenta que es una saga de cinco libros y que necesita una introducción.
En resumen, El ladrón del rayo ha sido un libro de diez, al que la verdad no he podido encontrarle ninguna pega. Tiene un buen ritmo, mucha acción, unos personajes que me han encantado y una trama muy interesante. ¡No puedo esperar para ponerme con el segundo libro de la saga!